Lo que viene…

Una vez más nuestros espíritus inquietos nos llevaron a plantearnos una nueva meta y es esa meta un algo especial.

Logramos combinar dos de nuestras grandes pasiones deportivas: el ciclismo y el montañismo y es en ese marco que nos decidimos a marchar “Al Aconcagua en Bici!!”

Se trata de salir pedaleando de nuestra ciudad (540 msnm) en tándem para recorrer poco más de 300 km hasta Puente del Inca (2700 msnm) en Mendoza y de allí adentrarnos en el Parque Provincial Aconcagua hasta el campamento base Plaza de Mulas (4300 msnm) en MTB para luego buscar su cumbre, el techo de América a los 6959 msnm.

“El Aconcagua, Centinela de Piedra, con sus pendientes inhumadas, donde el hielo y el viento son soberanos. Mítica mole que eleva su cima hasta los astros, mientras su sombra se proyecta hasta el océano. Aquí suelen tocarse los extremos: el principio y el final del camino; el éxito y el fracaso; la vida y la muerte. Escenario de historias poco comunes, de gestos de coraje, develador de vanidades y de temores. En él el hombre se muestra tal cual es, no hay lugar para la mentira.”

Se concen algunos anuncios e intentos similares de pretender la cumbre en bici, pero muy pocos logrados. Hay certeza de que en enero 1986 los suizos F. Mariani y sus compañeros subieron una bici Peugeot hasta la cumbre (foto 1) y que Gabriel Cabrera de Mendoza en 1990 (foto 2) y Mariano Loréfice de La Plata en 1994 (foto3) alcanzaron también la cumbre con sus mtb.

F. Mariani de Suiza el Primero en subir el Aconcagua

Gabriel Cabrera de Mendoza (1990)

Mariano Loréfice de La Plata (2004)

Entonces podemos decir no que seremos los primeros en intentar ascenderlo en bici, que no vamos a ser los primeros en alcanzar su cumbre en dos ruedas pero sí seremos los primeros sanjuaninanos (y los más veteranos) en intentarlo tomando como punto de partida la ciudad de San Juan y como destino su cumbre.

Entonces, planteado el reto, nos ponemos a trabajar en este proyecto. El paso siguiente es prepararnos, entrenarnos para tal fin y esto justamente es lo más divertido del asunto.

Como en todos los casos nuestra preparación se realiza después de haber cumplido con las labores de madre y padre, conlas tareas laborales y las de pareja. A pesar de que esto nos acorta los tiempos, representa un desafío más en si mismo.

A los cuidados de la salud, la alimentación y el descanso tan normales y necesarios le sumamos las salidas de entrenamiento que son lo mejor de todo, a éstas las dividimos en dos: cortas (de un día) y largas (de dos o más días). De las salidas largas hemos elaborado un cronograma hasta Diciembre que iremos publicando con anticipación por si alguno desea sumarse tanto para hacerlo completa o parcialmente y para entusiasmarlos les contamos que hemos programado una ida al Valle del Colorado, el ascenso a al límite con Chile por Agua Negra, a Manantiales, a cerros de la Precordillera entre otras. Todas pensadas en la preparación del cuerpo a la altura, el primer y principal rival a vencer.

La moneda está en el aire…